Ya hemos descubierto la historia y evolución de la ropa interior desde sus orígenes hace más de 5000 años hasta la Belle Epoque que puedes leer aquí: Historia de la ropa interior: Parte I
Y continuamos su historia; para ello nos vamos a los locos años 20 cuando la mujer se empodero comenzando a vestir y ser más libre. La ropa interior de esa época era sensual, artesanal y de diseños bonitos. Las piezas eran únicas llenas de transparencias, encajes, joyas y adornos. En cuanto a los hombres, primero llevaban un mono al que se cortaron las mangas y los pantalones; luego se dividieron en dos y los pantalones se llamarían bóxer por ser similares a los que usaban los boxeadores.
Llegado los años 30 y hasta los 50 la ropa interior era muy conservadora pero tenia un toque de erotismo. Se usaban tres piezas: unas bragas altas que cubrían desde la cintura hasta la parte donde comienza las piernas, el brassiere o sujetador que era de forma puntiaguda y las pantimedias que al principio eran de seda pero luego se fabricaron en nylon y se sostenían con ligueros. En cuanto a la ropa interior masculina aparecieron los calzoncillos con ventilación ajustados al cuerpo inspirados en los trajes de baño franceses.
Durante la guerra, la ropa interior se limito a un sujetador que seguía siendo de forma icónica, aportando un aspecto curvilíneo y femenino a la figura junto a unas pantalonetas con falda inferior. Y los hombres comenzaron a llevar boxers, convirtiéndose cada vez más populares hasta ser como los modelos actuales.
En los años 50, la ropa interior se vuelve sensual; regresando el corsé pero solo se ajusta a la cintura; además se acentúan las caderas y los senos voluminosos. Y aparece una novedad: la ropa interior en color negro.
Durante los 60, el sujetador es extremadamente cónico, con mucho relleno y almohadillas; además de ajustarse al hombro. Se siguen usando corsés y fajas que estaban reforzadas con placas frontales inelásticas conteniendo el abdomen y la cintura. Además aparecen en 1965 las ligas fabricadas en diferentes colores; además de las medias pantalón hasta la cintura.
En los 70, la ropa interior se vuelve minimalista y cómoda; se utilizan los sostenes y las pantaletas en miniaturas convirtiéndose en prendas ligeras que se adaptan a la piel.
Llegados los 80, aparecen todo tipo de prendas desde sujetadores de tipo camiseta, bodys, camisones, camisetas de tirantes o bragas de felpa de colores llamativos. También el Teddy que era un body con cintura elástica y el minimizer que era un sujetador deportivo.
La ropa interior de la época de los 90 se volvió muy sensual, llena de encajes y transparencias en forma de sujetadores, corsés y bodys. Para el hombre, aparece los calzoncillos de poliéster en colores llamativos.
Durante el 2000, la ropa interior se dejo ver, sobre todo las mujeres llevaban lencería de encaje como prendas de vestir; un estilo que actualmente se ha puesto de moda. ¿Te atreves?
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1 Comment
Viviana
20/02/2024 at 4:22 pmSiempre es interesante leer sobre estas cosas. Buen articulo.