Hoy vamos a descubrir la historia de unas botas, icono de las calles que han cautivado desde hace tiempo a rebeldes como los punk y que actualmente se han popularizado tanto que existen modelos que las imitan. Nos referimos a las míticas e inconfundibles Dr Martens.
Todo comenzó cuando estaba terminando la Segunda Guerra Mundial y el doctor Klaus Maertens se lesiono el pie esquiando, dándose cuenta que las botas militares eran muy incómodas para su pie lastimado; dedicó mejorarlas con cuero flexible y suelas de aire. Así, fabricó unas botas con suspensión neumática con las suelas con amortiguación de aire, característica propia de las Dr. Martens.
El doctor junto a un amigo universitario, el Dr. Herbert Funck emprendieron un negocio de botas en Seeshaupt (Alemania); sorprendentemente la mayoría de las clientas eran amas de casa que quedaron maravilladas con las botas con suelas duraderas y cómodas. Más tarde, abrieron una fábrica en Munich y en 1959, el fabricante británico de zapatos R. Griggs Group Ltd compró los derechos de la patente, dando lugar a que las botas comenzaran a poder fabricarse en Reino Unido. El fabricante británico cambio el nombre comercial llamándose Dr. Martens, añadió la costura amarilla y llamo a las suelas AirWair.
En abril de 1960, aparecieron en Reino Unido las primeras botas Dr. Martens en color rojo cereza, cuero de Napa, suelas especiales y con ocho agujeros a un precio asequible de dos libras que pronto se popularizó entre los obreros y trabajadores como policías, bomberos, albañiles o carpinteros debido a que era un zapato cómodo, resistente y perfecto para pasar muchas horas de pie. Podemos decir, que las Dr. Martens fueron en sus comienzos unas botas para la clase obrera.
Pero a finales de 60, las botas comenzaron a popularizarse entre bandas callejeras de la época como los skinkheads, los rude boys y casi cualquier tribu urbana de Londres que convertiría las Dr. Martens como símbolo de rebeldía.
Así durante los años 70, el boom de las Dr. Martens llegó gracias al integrante Pete Townshend del grupo británico The Who que fue de los primeros famosos en llevarlas. Luego les seguiría estrellas del rock y punk como The Cash o Sex Pistols. Las botas se convertirían en señal de identidad del movimiento punk de la época.
Más tarde durante los 90, las Dr. Martens volvieron a ser muy populares, gracias al movimiento grunge pero esta vez en Seattle (Estados Unidos). Y artistas como Nirvana o Pearl Jam las llevaba, esto hizo que muchos jóvenes quisieran llevar estas botas; dando lugar a un aumento de sus ventas e incluso se convertirían en unos zapatos de culto, símbolo del movimiento grunge.
Actualmente, las Dr. Martens continúan siendo muy populares, existen en una variedad de colores nuevos desde los clásicos en negro o blanco a otros más atrevidos como rosa, amarillo o azul e incluso podemos encontrarlas de estampados diferentes o con suelas de diversas alturas. Se dejan ver entre pasarelas de moda y combinadas con todo tipo de prendas. Además de ser un calzado que viste a todo tipo de personas desde un punk a un pijo.
Sin duda, las Dr. Martens son el sello de identidad perfecto del calzado que nunca morirá, gracias a su calidad, estilo y faceta polifacética.
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