En este artículo, vamos a descubrir dos importantes culturas antiguas y sus cánones de belleza que han marcado la historia y nos han dejado multitud de costumbres y creencias. Dedicamos este post, a la antigua cultura griega y a la romana que establecieron el emblema Mens sana in corpore sana.
Los griegos heredaron de los egipcios, los cuidados estéticos y se convirtieron en una cultura muy exigente en la búsqueda de las proporciones perfectas en el cuerpo humano.
Para ellos, el canon de belleza adecuado se basaba en rostro ovalado, cabellos ondulados, nariz recta, frente espaciosa; brazos y piernas largas y musculosas, hombros equilibrados, cintura esbelta y pecho pequeño.
La moda era tener la piel blanca, para ello consumían comino y usaban pigmentos para blanquear sus pieles. Las mujeres se pintaban los ojos con Khol, pero de forma más discreta que los egipcios.
También se puso de moda el deporte, con el fin de tener un cuerpo musculoso y armonioso. Para ellos, era muy importante la higiene y se daban baños, usaban mascarillas de arcilla y disfrutaban de masajes.
Los cánones de belleza establecidos por los griegos los cumplía la diosa del amor y la belleza Afrodita con su rostro angelical y delicado.
Los romanos también le dieron mucha importancia a los cuidados estéticos. Su gran aportación fueron las termas; baños públicos donde disfrutaban de masajes, saunas o aplicación de cremas.
El cabello fue el principal protagonista de esta cultura; se cuidaba, se perfumaba y se elaboraban complicados peinados. El rubio se convirtió en el color de moda; así algunas romanas se lo tintaban de ese color. También se pintaban las uñas y se marcaban con Khol las cejas y los ojos y comenzaron a usar pestañas postizas.
En la cultura romana, destacó la reina Jezabel que mostraba un canon de belleza sensual al contrario del canon angelical de Afrodita. Su cuerpo era voluptuoso y su rostro poseía labios carnosos, cabello y mirada oscura y dientes blancos. Puso de moda el uso de pendientes grandes, collares y broches en túnicas con grandes escotes.
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