Muchos recordaremos como la llegada del nuevo milenio hace ya 22 años, causó verdadero revuelo; y términos como el efecto 2000 nos son familiares; y es que con el comienzo de la nuera era se produjo un fallo informático que no registraba el nuevo año y esto podía conllevar a una fuerte crisis económica que llevaría el mundo al caos, junto a algunas profecías conspiranoicas de que el final de los tiempo estaba cerca.
Pero sorprendentemente, todo este caos, se convirtió en fuente de inspiración y la era digital influencio en la moda, creando una tendencia llamada Y2K o la tendencia de los años 2000.
El estilo Y2K mezcla el boom tecnológico de principios del año 2000 junto a elementos de la cultura pop; con influencia del futurismo con aires retro. Dando lugar a estilismos donde todo vale, donde se muestra el consumismo, el gusto por lo vulgar dejando a un lado la elegancia y lo armonioso. Para algunos, la estética del 2000 fue de mal gusto donde no se tuvo en cuenta lo estético, pero para otros fue un momento de llevar lo que te apetecía de una forma divertida.
Las zapatillas de deporte gruesas, el doble denim, la sastrería holgada y las camisetas básicas se convirtieron en tendencias de moda influenciadas por el auge de la tecnología; al igual que los bolsos baguette, los crop tops con aperturas y anudados, los pantalones de cintura baja, los chandales de terciopelo, el vestido bodycon y el rosa chicle surgieron de la cultura pop.
La moda Y2K mostraba el paso al nuevo milenio, por ello se unían prendas de aires retro con prendas de corte futurista. Además se fusionaban los excesos estilísticos donde no podían faltar los colores chillones, siendo el rosa chicle el protagonista, los brillos y las mezclas junto al street style de los años 90.
Se usaban combinaciones inusuales como los leggings o mallas con chaquetas americanas, excesos como strass en vaqueros o en chaquetas denim, tejidos metalizados, maquillaje de sombras en colores chillones, sin faltar el lado sexy de la tendencia como tops bandeau, el ombligo al aire o vestidos escotados y ajustados como el vestido bodycon.
Se usaban accesorios de joyas con mucho brillo, de plástico de colores, cinturones de cadenas, la esclava ( una pulsera-anillo), diademas anchas sobre la frente, el piercing estuvo de apogeo en el ombligo o las cejas, se adornaba las uñas o dientes con diamantes diminutos, se usaban anillos en el dedo del pie o se llevaba aros muy grandes.
No podemos olvidar a quiénes fueron iconos de la estética Y2K, sobre todo cantantes pop del momento como Christina Aguilera, Britney Spears, Destiny’s Child o Paris Hilton que lucieron todas las tendencias de moda propia del estilo.
Aunque parezca mentira en estos últimos años hemos podido ver la vuelta de la tendencia Y2K adaptada a nuestros tiempos, rescatándose algunas prendas como los colores chillones, el crop top con aperturas o anudado, el vestido bodycon, la mezcla de malla y blazer, los aros grandes, las zapatillas gruesas, las cadenas y el bolso baguette. Una tendencia que parece que les gusta a los jóvenes de la generación Z y a los millennials, que recuerda los comienzos de Internet mezclado con las fuertes influencias de la cultura pop.
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