La ilustración de moda es una forma de comunicación visual basada en el arte del dibujo. En el mundo de la moda, la ilustración se utiliza para mostrar desde ropa, accesorios de moda, modelos o cualquier situación relacionada con el sector.
Los diseñadores de moda suelen utilizarla para realizar sus bocetos y el diseño de figurines ayudando a plasmar sus ideas de forma más concreta, pero también se utiliza para el diseño de tejidos y estampados, siendo una de las salidas profesionales más demandas.
Por otro lado, la ilustración de moda se usa para editoriales y campañas publicitarias podemos verlas en portadas de revistas, ilustrando páginas de un artículo o usadas para anunciar un producto.
La ilustración de moda ha tomado popularidad, gracias a internet y a que estamos rodeados cada día por imágenes; siendo otra forma de comunicación visual que puede utilizarse para muchos fines; además de aportar exclusividad.
La ilustración de moda existe desde hace miles de años y está conectada a la necesidad del hombre de plasmar la evolución de la indumentaria y la conexión entre estatus social – ropa. Todo esto puede verse en las ilustraciones antiguas de civilizaciones como Egipto, la India o Japón donde aparecen las personas con sus ropajes típicos que muestran los diferentes roles sociales.
En Europa con el imperialismo, los artistas viajaron a otros países, especialmente de culturas diferentes, plasmando las diferentes formas de vestir que dieron lugar al exotismo; además de utilizar esas obras para comparar a los colonizados y a los colonos que eran catalogados como “civilizados” por su forma de vestir y comportarse. Así durante la colonización, se crearon cientos de grabados y xilografías que mostraban las vestimentas según la etnia, nacionalidad o rango; considerándose las primeras ilustraciones de moda.
No fue hasta el 1900 cuando la ilustración de moda tomó importancia en el sector; comenzó a utilizarse en revistas de moda como Vogue o Harper’s Bazaar con la finalidad de mostrar un estereotipo de mujer europea de la alta sociedad. Resaltan ilustraciones de “La Chica Gibson” realizadas por el dibujante Charles Dana Gibson que refleja el ideal perfecto de mujer europea victoriana de la época.
Llegaron los años 1910 y 1920, la moda y las tendencias estaban en auge, las revistas de moda eran demandadas y las ilustraciones se volvieron a color. Fueron momentos importantes para las ilustraciones de moda, que ayudaban al marketing de las revistas. Esto conllevo a que las ilustraciones se convirtieran en verdaderas joyas artísticas influenciadas por los movimientos artísticos del momento: el Art Deco y el Art Noveau.
Destacan ilustraciones de colaboraciones de artistas como Paul Poiret, diseñador de moda relevante de la época, que encargó al ilustrador Paul Iribe, que dibujase sus diseños. El resultado: Les Robes de Paul Poiret, un libro mágico repleto de ilustraciones de moda de la época.
El ilustrador Georges Lepape fue también relevante con sus ilustraciones de mujeres flapper, influenciado por el orientalismo (tan de moda en esa época ) y el ballets ruso. Sus obras aparecieron en portadas de Vogue, Vanity Fair o Harper’s Bazaar; además de colaborar con Poiret, creando una de sus obras maestras: Les Choses de Paul Poiret.
Pero la llegada de la fotografía, hizo primero que se alternarán ambas artes, hasta que finalmente la ilustración de moda fue decayendo; hasta su resurgir; siendo actualmente una de las formas de expresión más demandadas. Y es que no podemos olvidar, que es un verdadero arte.
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