El Tetris o el Lego son juegos de construcción muy conocidos, y están basados en girar piezas de colores para que encajen en un espacio de dos o tres dimensiones. Todo el mundo se ha entretenido intentando edificar complejos diseños, pero parece que este tipo de juegos también ha servido a prestigiosos arquitectos para la creación de edificios reales.
– Habitat 67 (1967) de Moshe Safdie, Montreal, Canadá. Habitat es un complejo de viviendas de módulos de hormigón, concebido originalmente como tesis doctoral y con objetivo de reinventar el concepto de edificio residencial. Safdie utilizó bloques de Lego para realizar las maquetas. Posteriormente se edificó como pabellón para la Exposición Universal de 1967. Se trata de uno de los edificios brutalistas más reconocibles del país.
– Nakagin Capsule Tower (1972) de Kisho Kurokawa, en Tokio, Japón. Se trata de una torre residencial y de oficinas, uno de los pocos ejemplos del Movimiento Metabolista japonés, y el primer ejemplo mundial de arquitectura de cápsulas construida para un uso permanente. Cada una de estas cápsulas de 10m² posee cama, baño, escritorio y una ventana circular. Están acopladas unas a otras por grandes tornillos, por lo que se pondrían reubicar. El edificio sigue en pie, pero su mal estado ha causado que muchas cabinas estén abandonadas.
– Kubuswoningen o ‘Las Casas Cubo‘ (1984), de Piet Blom, en Róterdam, Países Bajos. El diseño de estas originales casas se consiguió girando 45º el cubo convencional y emplazándolo sobre pilares de forma hexagonal, dando al conjunto apariencia de bosque. Los treinta y ocho cubos modulares corresponden a viviendas de unos 100m² organizadas en tres plantas, con entrada, cocina abierta, dos dormitorios, un baño y un pequeño jardín en el tejado. Se pierde mucho espacio por sus paredes en diagonal.
– Hundertwasserhaus (1985), de Friedensreich Hundertwasser, en Viena, Austria. Se trata de un complejo residencial vanguardista, de viviendas sociales, locales comerciales, terrazas, azoteas, un jardín de invierno y áreas de juegos infantiles. No se adapta a las normas convencionales de arquitectura, y combina pisos y fachadas ondulantes, aberturas irregulares, colores y vegetación.
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