Una de las tendencias desde hace años en la decoración de interiores, tanto para hogares como para locales comerciales, es el estilo industrial.
A pesar de su nombre, no se trata de una decoración fría y rudimentaria, al contrario, tiene un carácter bohemio y artístico que puede ser muy acogedor.
Encontramos los orígenes del estilo industrial en la década de los cincuenta en Estados Unidos. Los artistas se instalaban en fábricas abandonadas buscando espacios diáfanos donde dar rienda suelta a su creatividad. Esto dio lugar a los loft, espacios amplios sin tabiques y apenas separaciones, caracterizado por elementos febriles; techos altos, paredes de ladrillo vista, estructuras desnuda y el uso de los metales.
El estilo industrial puede destilar cierto aire retro y vintage, combina con piezas antiguas, que pueden ser rescatadas de mercadillos y anticuarios. Piezas únicas con mucha personalidad. Los muebles característicos de este estilo suelen estar desgastados o decapados. Debido a la importante carga visual y protagonismo de los muebles, es interesante darles su propio espacio y saberlos combinar con el resto de objetos y accesorios.
La paleta de colores suele abarcar el blanco, negro, gris, marrón, beige y azul. Colores sobrios, a los que se les puede dar cierto toque de color con los muebles y los accesorios.
Otro de los aspectos fundamentales de estos espacios son los grandes ventanales imitando la estética de antiguas fábricas, que aportan gran cantidad de luz natural a la estancia. En el estilo industrial no se suele usar cortinas, ni ningún otro tipo de elementos para tapar las ventanas.
Para un estilo industrial auténtico es mejor no abusar de los elementos decorativos, ya que romperíamos la esencia del estilo que se basa en la amplitud del espacio. En este punto es importante la creatividad, rediseñar accesorios y objetos con botellas de vidrio, libros antiguos, lámparas retro, etc.
Lo interesante es conseguir un ambiente armónico y acorde con aquello que queremos transmitir, combinando sabiamente todos los elementos decorativos. Siendo el orden un factor muy importante de este estilo.
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